Los niños y el sueño
Los patrones de sueño de los niños son muy diferentes a los patrones de sueño de hombres y mujeres adultos. A medida que crecen, estos patrones cambiarán y evolucionarán, pero a pesar de todo, la importancia de dormir la cantidad adecuada es constante.
Los niños necesitan dormir mucho
Si bien las horas recomendadas varían según la edad, una cosa es cierta: el sueño es fundamental para el crecimiento y desarrollo de un niño. Cuando son bebés, los niños pasan la mayor parte del tiempo durmiendo (entre 14 y 17 horas al día). Para cuando son adolescentes, necesitan entre 8 y 10 horas de sueño. El cuadro a continuación muestra las pautas de sueño recomendadas por la National Sleep Foundation para niños.
Independientemente de su edad, es importante que su hijo duerma todo lo que necesita en un ambiente cómodo y tranquilo. Esto se debe a que sus ritmos circadianos, o relojes internos, a menudo se basan en tomar siestas a la mitad del día. Un estudio [1] mostró que todo lo que se necesita es perder una siesta para afectar la capacidad de un niño para reaccionar y disfrutar de su entorno. Durante este estudio, los niños pequeños que se saltaron la siesta mostraron respuestas más negativas a su entorno, así como una menor capacidad para responder a los acertijos. Saltarse estas siestas incluso puede contribuir a la falta de sueño.
Trastornos del sueño en niños
Los trastornos del sueño son bastante comunes en los niños e incluyen:
- Terrores nocturnos (despertares parciales del sueño acompañados de gritos o arrebatos emocionales)
- Caminar dormido
- Pesadillas
- y enuresis
Los niños adolescentes también pueden experimentar algo llamado trastorno de la fase tardía del sueño. El síntoma más notable de este trastorno es el deseo de acostarse muy tarde, lo que provoca dificultad para despertarse por la mañana. La buena noticia es que, la mayoría de las veces, los niños superan estas afecciones al crecer.
La apnea del sueño y los niños
Los niños no son inmunes a la apnea del sueño, aunque las causas y los síntomas pueden diferir de los de los adultos. En los niños, una de las causas más comunes de apnea del sueño son las amígdalas o adenoides de gran tamaño. En estos casos, la apnea del sueño a menudo se puede curar mediante una amigdalectomía.
Si le preocupa que su hijo tenga apnea del sueño u otro trastorno del sueño no diagnosticado, hable con uno de nuestros especialistas en sueño. Realizamos estudios de sueño en niños mayores de un año en nuestros centros de sueño, incluso los fines de semana. Nuestros técnicos dedicados tienen experiencia trabajando con niños y administrando estudios del sueño en un ambiente cómodo y afectuoso. Un padre o tutor pasará la noche en la misma habitación con el niño.